jueves, 16 de mayo de 2024

salmo y cántico

Cantamos, Señor, alegres siempre en nuestro camino, pues tú eres la vida.
Cantamos danzando, abriendo las manos, sintiendo tu vida pasar por la nuestra.
Cantamos, Señor, al Dios hecho hombre cercano a los pobres, abierto siempre.
Ahora, Señor, queremos unir nuestras voces a las de toda la creación
para decirle al mundo que tú eres maravilloso.
Cantamos, Señor, al Dios de la vida, más joven que la juventud,
y bailamos en tu nombre, pues tú eres la fiesta que nunca se acaba.
Encontrarte a ti es un cántico nuevo. Amén.

¿Qué es el veneno?

        ~Yalal ad-Din Muhammad Rumi – Siglo XIII.

– Cualquier cosa más allá de lo que necesitamos es veneno. Puede ser el poder, la pereza, la comida, el ego, la ambición, el miedo, la ira, o lo que sea…
¿Qué es el miedo?
– La no aceptación de la incertidumbre. Si aceptamos la incertidumbre, se convierte en aventura.
¿Qué es la envidia?
– La no aceptación de la bienaventuranza en el otro. Si lo aceptamos, se torna en inspiración.
¿Qué es la ira?
– La no aceptación de lo que está más allá de nuestro control. Si aceptamos, se convierte en tolerancia.
¿Qué es el odio?
– La no aceptación de las personas como son. Si las aceptamos incondicionalmente, a continuación, se convierte en amor.
¿Qué es la madurez espiritual?
Es cuando se deja de tratar de cambiar a los demás y nos concentramos en cambiarnos a nosotros mismos.
Es cuando aceptamos a las personas como son.
Es cuando entendemos que todos están acertados según su propia perspectiva.
Es cuando se aprende a «dejar ir».
Es cuando se es capaz de no tener «expectativas» en una relación, y damos de nosotros mismos por el placer de dar.
Es cuando comprendemos que lo que hacemos, lo hacemos para nuestra propia paz.
Es cuando uno deja de demostrar al mundo lo inteligente que se es.
Es cuando dejamos de buscar la aprobación de los demás.
Es cuando dejamos de compararnos con los demás.
Es cuando se está en paz consigo mismo.
La madurez espiritual es cuando somos capaces de distinguir entre «necesidad» y «querer» y somos capaces de dejar ir ese querer.
Y por último y lo más importante:
Se gana madurez espiritual cuando dejamos de unir la «felicidad» a las cosas materiales.

martes, 14 de mayo de 2024

Lo que quiero ser

        José María R. Olaizola, SJ

Quiero ser pastor que vele por los suyos;
árbol frondoso que dé sombra al cansado;
fuente donde beba el sediento.
Quiero ser canción que inunde los silencios;
libro que descubre horizontes remotos;
poema que deshiele un corazón frío;
papel donde se pueda escribir una historia.
Quiero ser risa en los espacios tristes,
y semilla que prende en el terreno yermo.
Ser carta de amor para el solitario,
y grito fuerte para el sordo…
Pastor, árbol o fuente, canción, libro o poema…
Papel, risa, grito, carta, semilla…
Lo que tú quieras, lo que tú pidas,
lo que tú sueñes, Señor… eso quiero ser.

La foto de mamá (escuchar a los niños)

Una maestra hizo este experimento…
“Hace unos años empecé a tomar fotos imprevistas a las mamás de mis alumnos cuando venían a buscarlos. Ninguna posó para la foto.
Cuando imprimí las fotos, tooooodas y cada una de las mamás se encontraron mil defectos en las fotografías (¡mis arrugas!, mi tripa no da más, ¡mi pelo que horrible!, mis canas, que gorda... etc etc etc).
Mostramos las mismas fotos con tantos "defectos" a sus hijos, mezcladas con fotos de modelos de belleza "ideal" con la pregunta ¿Quién te parece que es la mujer más guapa entre todas?
Cada uno de los niños eligió la foto de su mamá.
Y cuando les preguntamos el porqué de su elección, que era lo que hacía la "más linda" a su mamá, las respuestas fueron varias.
- 'Porque su sonrisa es gigante' 4 años
- 'Mira sus ojos profe, están llenos de amor 4 años
- 'Porque cuando se ríe es como cuando sale el sol' 4 años
- 'Porque sus brazos son largos... larguisimos… justito para que yo quepa' 4 años.
- 'Porque en su cara hay arcoiris' 4 años
- 'Porque sus besos son unfinitos (y al preguntar que significa 'Unfinito' dijo 'es cuando no importa si te portas mal o bien' siempre puedes pedirle besos a tu mamá jajaja) para mi' 4 años
- 'Porque cuando hace frio su piel siempre esta calentita' 4 años
- 'Porque sus ojos son marrones, como los míos' 4 años
- 'Porque sus brazos pueden abrazarme siempre que me siento triste' 4 años
- 'Porque su pelo es suavecito y su risa es simpatica, me hace cosquillitas cuando se ríe' 4 años

Y así es como Oscar Wilde: tenía razón, “la belleza esta, en definitiva, en el ojo del espectador”
Que maravilla… solo para recordar que a veces hay que limpiar nuestros cristales profundamente para disfrutar más de lo que vale la pena.

domingo, 12 de mayo de 2024

Salmo a la Ascensión

Te vemos, Señor, subir en una nube
y ascender al cielo a la diestra del Padre.
A veces te creemos un poco lejos de nosotros,
y, sin embargo, sabemos, Señor,
que tú eres cercanía total.
Te vas, pero te quedas para estar con nosotros
todos los días hasta el fin del mundo.
Te vas y te acercas para decirnos a todos
que tu delicia es vivir entre nosotros.
Te vas y siembras de alegría nuestra tristeza,
pues tú no olvidas a nadie sino que te acercas más a todos.
Tú, Señor, ascendido a los cielos,
te vas, para estar más cerca. Amén.

Testigo José María R. Olaizola, SJ
Si te atacan, déjame ser testigo de la defensa.
Quiero gritar al mundo nuestra amistad
aunque demasiadas veces te he fallado.
Intentaré, esta vez, soltar la piedra
y escribir, en la arena palabras de amor,
como tú me enseñaste.
Déjame mostrar el barro que tú vuelves tesoro
si te dejo ser alfarero de mis días.
Contaré las historias que aprendí de Ti.
Expondré tu lógica que trastoca protocolos
Y aunque mi palabra mar solo balbuceo,
basta un eco de tu voz para despertar, en otros,
nostalgias de infinito.
Sé que tú no necesitas mi defensa,
pues tu evangelio ya venció.
Soy yo, que necesito ser más discípulo,
aprendiendo de ti,
hacer de la vida hogar y fiesta.
Que quien me escuche, Te oiga
y quien me busque, te halle.
Que quien me encuentre Te abrace,
Y quien me mire, Te vea.

La leyenda del pan

Había una vez, hace mucho, mucho tiempo, dos pueblos vecinos que estaban peleados, tan peleados, que no querían tener nada igual, ni siquiera nada parecido: si uno plantaba trigo, el otro cultivaba patatas; si en uno los músicos tocaban la guitarra, en el otro soplaban la flauta.
Y así ocurría con las comidas, los vestidos, los trabajos y las fiestas. Todo tenía que ser completamente diferente, menos una sola cosa: en los dos pueblos había panadería y se comía pan. Pero claro, no era el mismo pan.
En un pueblo el pan era sequito, casi como uno galleta, pura corteza tostada. En el otro hacían un pan blando, un bollo tierno como una espuma blanquísima, toda miga, que se deshacía en la boca.
Un buen día, el hijo del panadero de uno de los pueblos se enamoró de la hija del panadero del otro pueblo.
De nada valieron las protestas de los padres porque los jóvenes se amaban y querían estar juntos. Después de muchas discusiones, los mayores aprobaron el casamiento con la condición de que se fueran a vivir a otro pueblo cercano, pero donde no hubiera panadería; y entonces serían ellos, los enamorados, los panaderos del lugar.
Pero. ¿Cómo tendría que ser el pan para que ninguno de los dos pueblos se sintiera disminuido? La nueva panadería debería fabricar un nuevo pan que fuera algo así como una unión de bollos y galletas. ¿Cómo hacer un pan que tuviera el mismo tiempo miga y corteza?
Los jóvenes panaderos hicieron muchas pruebas; con más y con menos harina, con más y con menos calor en el horno, hasta que por fin consiguieron dorar la corteza y mantener blandito el interior del pan.
Y así, por primera vez, la gente de ese pueblo probó el pan que ahora todos conocemos, y los panaderos que lo fabricaban fueron muy felices.