viernes, 27 de abril de 2018

Salmo del corazón I

Quiero compartir mi corazón contigo, Señor Jesús.
Quiero hacer de mi corazón pan tierno y fresco,
hogaza de labrador compartida en la mesa de todos,
donde no hay puestos porque no hay primero.
Dejo en la mesa mi pan hecho migas,
y el mantel manchado en rojo como recuerdo.
Dejo mi silla de paja que espera
al que siempre ocupa el último lugar como puesto.
Mi corazón, Señor del alba, se hace mesa,
mantel blanco de amistad para los pueblos.
Mi corazón, Señor Jesús, se siente solo
cuando tu medida no lo llena dentro.
Mi corazón se arruga y sufre y llora
cuando el Amor no enciende mi amor en fuego.
Tú eres el mar. Yo soy la playa.
Tú eres la ola que inunda mi arena llevada al viento.
Mi corazón lo hiciste para ti, Señor del alba,
y no es feliz si tú no eres, al fin, su Centro.
Tú eres amor, por eso buscas, peregrino,
mis amores perdidos en ídolos de paja y hierro,
que se esfuman y se vengan como dioses extraños
a las manos que de la mano nos hicieron.

2 comentarios:

  1. Nos gustaría conocer el autor de Salmo del Corazón, se lo agradeceríamos en nuestra Parroquia en Costa Rica. Daniel Miranda mife54@gmail.com

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    1. Según la información de la que dispongo es Emilio Mazariegos que adaptó unos cuantos salmos

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