viernes, 16 de junio de 2017

Te llamé a vivir

Te llamé a vivir
Te hice hermoso con mis propias manos.
Te comuniqué mi vida
Deposité en ti mi propio amor con abundancia.
Te hice ver el paisaje y el color.
Te di el oído para que escucharas 
el canto de los pájaros y la voz de los hombres.
Te di la palabra para decir:
"padre", "madre", "amigo", "hermano".
Te di mi amor más profundo.
No sólo te di vida.
Te estoy sosteniendo en ella.
Tú eres mi hijo amado
Te conozco cuando respiras
y te cuido cuando duermes.
No lo dudes.
Mis ojos están puestos en tus ojos.
Mi mano la tengo colocada sobre tu cabeza.
Te amo, aunque me olvides o me rechaces.
Te amo aunque no me ames.
Ya lo sabes.
Podrás ir donde puedas y donde quieras.
Hasta allá te seguirá mi amor
y te sostendrá mi diestra.
¿O es que crees que yo como Padre 
puedo olvidar a mi hijo?
¡Ni lo sueñes!
Desde que te hice ya no te puedo dejar solo.
Camino y sonrío contigo
Vivo en ti.
Te lo escribo de mil maneras 
y te digo al oído y en silencio.
Eres mi hijo. Te amo,
Tu Padre, ¡DIOS!

No hay comentarios:

Publicar un comentario